Las 4 razones por las que fallan las relaciones
Las 4 razones por las que fallan las relaciones
Por Dr. Travis Bradberry
Autor galardonado y bestseller, cuyos libros han vendido millones de copias y están disponibles en más de 150 países. El Dr. Bradberry es una Voz Principal en LinkedIn, con 2.5 millones de seguidores en la plataforma.
Una nueva relación, ya sea personal o profesional, es bastante similar a comprar un carro nuevo. Conducirlo fuera del concesionario es pura felicidad. Y al igual que un carro, cuando una relación se descompone, resulta abrumador. Un ojo entrenado sabe cuándo un carro está en problemas. Lo mismo ocurre con las relaciones, y tú puedes ser tu propio mecánico.
El Dr. John Gottman y sus colegas en la Universidad de Washington descubrieron cuatro claros indicadores del fracaso de una relación, a los que llamaron "Los Cuatro Jinetes del Apocalipsis". Los Cuatro Jinetes son tan profundos que su presencia predice la desaparición de una relación con una precisión del 93%.
Los investigadores en Washington realizaron sus predicciones con parejas casadas, pero estos comportamientos también causan estragos en el lugar de trabajo. He evaluado a millones de personas y comparado la calidad de sus relaciones laborales con su desempeño laboral. He descubierto que el 90% de los mejores ejecutantes son hábiles en la gestión de relaciones y evitan Los Cuatro Jinetes como la plaga. También he encontrado que Los Cuatro Jinetes son bastante comunes en el lugar de trabajo, y cuando hacen su aparición, las relaciones, el trabajo en equipo y el desempeño sufren.
Los Cuatro Jinetes del Apocalipsis
Los Cuatro Jinetes representan los actos contraproducentes a los que fácilmente podemos caer víctimas cuando nuestras emociones nos dominan. Mientras lees cada uno de los Jinetes y consideras su relevancia en tus relaciones, recuerda que el conflicto en sí mismo no es el problema. El conflicto es en realidad una parte normal e idealmente productiva de dos personas con necesidades e intereses diferentes trabajando juntas. La cantidad de conflicto entre dos personas no tiene relación con el éxito de la relación. Es cómo se maneja el conflicto lo que determina el éxito de una relación, y la presencia de los Cuatro Jinetes significa que el conflicto no se está abordando de manera constructiva o productiva. Sigue las estrategias proporcionadas para superar a cada uno de los Cuatro Jinetes, y tus relaciones seguramente tendrán éxito.
El 1er Jinete: LA CRÍTICA
La crítica no debe confundirse con brindar retroalimentación o buscar de otra manera la mejora o el cambio en otra persona. La crítica se convierte en, bueno, crítica cuando no es constructiva ("Este informe es terrible."). La crítica, en su forma más problemática, se enfoca en la personalidad, el carácter o los intereses individuales en lugar de la acción o el comportamiento específico que te gustaría ver cambiado ("Eres terrible escribiendo. Eres tan desorganizado y tangencial."). Es una cosa criticar sin ser constructivo; es otra ir tras alguien por algo que no pueden cambiar.
Superar la CRÍTICA
Si a menudo te encuentras criticando cuando planeabas ser constructivo, es mejor que no entregues tus comentarios y observaciones hasta que hayas planeado con anticipación. Deberás pensar en lo que vas a decir y ceñirte a tu guion para mantener una actitud constructiva y evitar la crítica. También es mejor si enfocas tus comentarios en un comportamiento específico, ya que tus reacciones a múltiples comportamientos a la vez pueden ser fácilmente percibidas como críticas. Si encuentras que no puedes brindar retroalimentación sin generalizar hacia la personalidad de la otra persona, es mejor que no digas nada en absoluto.
El 2do Jinete: EL DESPRECIO
El desprecio es cualquier señal abierta de falta de respeto hacia otra persona. El desprecio a menudo implica comentarios que buscan menospreciar a la otra persona, así como insultos directos. El desprecio también se ve en formas indirectas y veladas, como el rodar de los ojos y el enmascarar insultos en forma de "humor".
Superar el DESPRECIO
El desprecio surge de la falta de interés en la otra persona. Cuando descubres que no disfrutas ni admiras a alguien, quizás haya cosas sobre él o ella que solían ser interesantes o encantadoras y ahora han perdido su brillo, el desprecio puede surgir inesperadamente. Si tu desinterés es inevitable y la relación no va a ningún lado, como un miembro de la familia o un compañero de trabajo, entonces necesitas enfocarte en dar pequeños pasos adelante. Las personas que manejan bien las relaciones son capaces de ver el beneficio de conectarse con muchas personas diferentes, incluso aquellas de las que no son aficionadas. Un terreno común, por pequeño que sea, es un bien preciado que debe buscarse y apreciarse. En palabras inmortales de Abraham Lincoln: "No me agrada ese hombre. Debo conocerlo mejor".
El 3er Jinete: LA DEFENSA
Negar la responsabilidad, buscar excusas, responder a una queja con otra y otras formas de defensa son problemáticas, ya que impiden que un conflicto llegue a cualquier tipo de resolución. La defensa solo sirve para acelerar la ansiedad y la tensión experimentadas por ambas partes, y esto dificulta centrarse en los problemas más grandes que deben resolverse.
Superar la DEFENSA
Para superar la defensa, debes estar dispuesto a escuchar cuidadosamente la queja de la otra parte, incluso si no ves las cosas de la misma manera. Esto no significa que tienes que estar de acuerdo con ellos. En cambio, te enfocas en comprender completamente la perspectiva de la otra persona para que puedan trabajar juntos en resolver el conflicto. Es fundamental que trabajes en mantener la calma. Una vez que entiendas por qué la otra persona está molesta, es mucho más fácil encontrar terreno común que si desestimas sus opiniones defensivamente.
El 4to Jinete: LA OBSTRUCCIÓN
La obstrucción es lo que sucede cuando una persona cierra la discusión al negarse a responder. Ejemplos de obstrucción incluyen el tratamiento silencioso, estar emocionalmente distante o desprovisto de emoción, e ignorar por completo a la otra persona. La obstrucción es problemática, ya que irrita a la persona que está siendo obstruida y evita que ambos trabajen en resolver el conflicto juntos.
Superar la OBSTRUCCIÓN
La clave para superar la obstrucción es participar en la discusión. Si estás obstruyendo porque las circunstancias te hacen sentir abrumado, hazle saber a la otra persona cómo te sientes y pídele un tiempo para pensar antes de continuar la discusión. Mantén el contacto visual y una postura hacia adelante, asiente con la cabeza para que la otra persona sepa que estás comprometido en la discusión y escuchando incluso cuando no tienes algo que decir. Si obstruyes como una práctica habitual, debes darte cuenta de que participar en discusiones y trabajar juntos para resolver conflictos son las únicas formas de evitar que tus relaciones se desmoronen.